¿Liguria 2.0?
La Soga Vitacura
Cómo llegué a La Soga Vitacura
Marcelo del Pino, amigo y gran sibarita, le dijo a la Maida Mas (@ComoyExisto) y a mi que fuésemos por un sanguchito al nuevo restaurante La Soga Vitacura. Tenía razones: Gino Falcone, del Sarita Colonia, quedó enamorado del Barros Luco de ahí. Y pucha que sabe ese hombre.
Así que después de unos días intentando coordinar, quedamos con la Maida de ir hoy a las 13 a La Soga Vitacura.
Esta foto la saqué del sitio www.santiago.restorando.cl
Restaurante La Soga Vitacura
El restaurante La Soga Vitacura es un nuevo local ubicado en Las Tranqueras, casi esquina con Vitacura (frente al Moloko). Abrió hace unos meses, y le ha ido bastante bien por varias razones.
La primera, su chef. Es el reconocido Alfredo Gutiérrez, quien por más de 15 años comandó la cocina del Bar Liguria. Ahora le tocó independizarse junto a un empresario gastronómico venezolano, para abrir La Soga Vitacura. Aquí, al igual que en su ex casa, se enfoca en servir comida chilena, con una vuelta un poco más gourmet.
Una de las grandes gracias es que trabaja siempre con productos frescos de cada temporada. Por lo mismo, la carta cambia unas tres o cuatro veces al año. ¿Algo más? Sí. La carta de cocktails fue hecha por mi amigo Miguel González Larraguibel, más conocido como Maldito Barman. Es decir, tomar aquí es un festín para el paladar (no está en la carta, pero pidan sí o sí un cocktail con jugo de sandía y de pomelo. IN-CRE-Í-BLE).
El local está muy bien decorado, con una rica terraza y cuenta con estacionamientos.
Les dejo la página web de La Soga Vitacura.
Fotos tomadas con mi Sony Xperia X
Carta de sándwiches La Soga Vitacura
La Soga Vitacura ofrece cuatro tipos de sándwiches. Como son pocos, se los menciono todos.
El más famoso, les diría que es el Barros Luco, que aquí se llama Luco La Soga, y tiene lomo de vacuno, queso y cebolla frita ($6.200). También hay un sándwich vegetariano de berenjenas (gigantes y sabrosas) con dos quesos y berros ($5.200).
Hay un tercer sánguche de lomo de chancho con cebolla frita, y para terminar, una hamburguesa casera rellena con queso Roquefort.
Es decir, al igual que en el resto de la carta, se privilegia la calidad de los productos. Por lo mismo, los sánguches son simples, para que destaquen los ingredientes.
Sándwich Barros Luco en La Soga Vitacura
Contundente. Con harto de cada ingrediente.
Un pan hecho en el mismo restaurante, bien sabroso pero de mucha miga eso sí. Si le bajase un poco la proporción, creo que sería un hit (PD: el pancito que ponen mientras esperas a que llegue tu plato, es una maravilla. También es casero).
La carne, es un lomo de vacuno de buen grosor, y lo sirven en varias láminas, cosa que se agradece. Rico, pero he probado mejores.
La cebolla, con un justo toque de dulzor natural, sin azúcar adicionada. No le peleaba el puesto al resto de los ingredientes. Bien.
Es un sándwich bueno, que cumple. Y ya lo dije arriba, pero insisto: para tomar, vayan por el cocktail que tiene jugo de sandía. Es que es muuuuy bueno!
En resumen: La Soga Vitacura replica al Liguria con frescura
Las bases se mantienen con el Liguria. Y obvio, si el chef es el mismo, y él tiene sus raíces y fortalezas claras.
Eso sí, creo que tiene mayor frescura este nuevo restaurante. Puede contar con platos “tradicionales chilenos”, pero con un twist muy sabroso (como su chupe de jaiba y ravioles, o las berenjenas con queso Roquefort y de oveja).
Aquí puedes comer bien y conocer un poco más de la comida chilena, pero puesta en un altar. Buen local.
