Arbequina Sándwich, Providencia

jueves 19 de abril

Soy una persona simple. O más bien, fácil (de seducir!). Si estoy viajando y el hotel donde me quedo me deja un chocolatito en la almohada, se gana mi corazón. Y es que independientemente de mi excesivo amor por la comida, los regalos siempre son bien recibidos. ¿O no? Por algo el dicho de “a caballo regalado, no se le miran los dientes”, y también que lo gratuito es una de las bases de las ventas (en los clásicos canales de “Llame ya” abusan de darte una unidad extra si compras de inmediato; en el Metro de Santiago te “regalan” calendarios para que después dejes una donación, y así un sinfín de ejemplos). En el fondo, al entregar algo, lo más probable es que generes una reacción favorable en el otro, generando que te compre, consuma, promocione, o haga lo que quieras.

Eso fue justamente lo que me pasó hoy. Porque al conocer el local de sandwiches y ensaladas “Arbequina”, tuve una reacción favorable. Y es que Arbequina cae bien. Y adivinaron: cae bien porque te regalan cosas. No solo a los clientes, sino que a cualquier transeúnte que pase por ahí. Entras al local, sacas un pancito (o un pedazo de tortilla salteada… ojalá les toquen esas tortillitas!! Son mortales. Vienen condimentadas con especias, y al untarlas en una de sus mágicas salsas… YA!, Perdón, mejor vuelvo a hablar de lo otro porque si no podría detallarles varias líneas sobre lo rico que son esas tortillas jaja). Ejem ejem. Como les decía… puedes sacar un pancito con alguna de sus 12 salsas, además de un mini bowl blanco, estilo japonés, para tomar un reponedor consomé. Con eso ya te engatusan y te dan ganas de sentarte a pedir.

La carta de Arbequina sándwich

Una vez atrapado en su pequeña pero acogedora terraza, ves la carta y sientes que se te cayó la mandíbula y que babeas por lo atrevido de las combinaciones y lo detallista de las descripciones. Sándwiches de ají de gallina, uno tipo pastel de choclo, otro con crema de arándanos. La carta es amplia. Y los platos, contundentes (incluso las ensaladas!).

El sánguche de Arbequina sándwich

Hoy me pedí la maravilla de la foto que, según su dueño Pedro, es el sándwich ícono de Arbequina: el Berlusconi. Y hay que decir que le hace honor a su nombre: productos de origen italiano, frescos como Silvio, atrevidos, cancheros, jugados, polémicos… hasta peligrosos. Anoten: carne bien sazonada, zucchini grillado con un toque de ajo, pimentón caramelizado, champiñones y ricotta, todo en un crujiente y calientito ciabatta.

Soy fan de la mezcla de la ricotta con cosas dulces (el pimentón en este caso). Así que “Berlusconi” partió bien. Además, súmenle el pan tostado (para mi un “desde”, pero que lamentablemente en Chile no se suele hacer), y una carne que me recuerda a la usada en el clásico Lomo Saltado peruano. Quizás los pimentones estaban un poco pasados al azúcar, pero con el hambre que tenía a las 14:00 después de haber pasado por varias reuniones en mi trabajo, ni me importó. 5 narices de chancho para esta obra de arte, y el bonus de que volveré a probar al menos 2 preparaciones más, para que este local tenga el lugar que merece en esta guía sanguchera. Pedro, felicitaciones. Te lo mereces, y suerte en la ampliación!

SÁNGUCHE:

BERLUSCONI

NOTA:

Local:

Arbequina

Precio:

$5.600

Dirección:

Capellán Abarzúa 8, Providencia.

Ingredientes:

Carne, zucchini grillado con un toque de ajo, pimentón acaramelado, champiñones y ricotta.