Tenía pollo apanado en panko y frito, guacamole de la casa, coleslaw, alioli infusionado con tomates deshidratados, en pan de @bellagiotuckshop. ¿Estaba rico? Sí. ¿Me mató? No.
El pollo lo marinan 24 horas en soya, jengibre y miel, lo que le da un toque distinto. Bien ahí, pues con ese tiempo efectivamente el pollo toma otro gustito muy bueno. El apanado era crocante. La cosa es que, malditas comparaciones, no estaba tan mojadito ni tan rico como los pollos que probé en Melbourne en @sonnysfriedchickenandburgers ni en @phatstacksburgers.
El coleslaw era bien cremoso y crocante. Lo que encuentro que falló brígido fue el guacamole. Estaba medio líquido, así que no pasa la prueba de la textura (y bueno, tampoco tenía trocitos de tomate que para mi eso es sacrilegio). Cosas que pasan.
La salsa sí tengo que destacarla, porque pucha que es rico el alioli, pero es mucho mejor aún cuando viene infusionado con tomate deshidratado. Buena forma de aprovechar al máximo al sabor de esos tomates, eliminando su textura que puede no ser muy beneficiosa para un sándwich.
Buen sándwich, pero me quedo con pena por no haberles hecho caso y probar la burger. ¡Deuda pendiente!