Verificado
Jaime tenía razón.
SÁNDWICH N°624: hoy fui a @DishCZ, el local que más me tincaba de Praga si me basaba 100% en las fotos de sus sándwiches. Y cuando llegué, descubrí que tenían uno de goulash, un plato típico de República Checa (y también de Hungría). ¡Cómo no pedirlo! Jaime fue por la burger “Chilli Schack”, con una hamburguesa de 160 gramos de carne, con quesos suizo y cheddar, tocino, cebolla frita, ají rojo encurtido y una mayonesa al tocino. ¿Cuál estuvo mejor? La de Jaime, POR LEJOS. El goulash es un estofado de carne muy rico, pero acá venía desmenuzado y algo seco. No malo, pero muy del montón. Le faltaron mejores acompañantes. Mientras que la burger de @JaimeSanchezBarcelo era una delicia. Exquisita, bien jugosa y con los sabores de los acompañamientos balanceados. Viene en un pan de harta miga, pero liviana y esponjosa. Ojo con la carne: a pesar de que venía bien cocida, estaba muuuuy jugosa. Los jugos caían al plato (lástima que no había una cama de papas fritas para aprovechar todo ese chorreo jaja), y al apretarla parecía inundación carnívora 😍. Impresionante. Como ya es tendencia en esta cuenta, obvio que la cebolla frita suma más puntos aún. ¿Es que hay algo más rico que el sabor de la cebolla, pero encapsulada en un mini y ligero batido que al freírlo se transforma en un milagro crocante? No. No lo hay.
Algunas cosas que aprender de estos chiquillos: le echan doble salsa (arriba y abajo); el pan viene enmantequillado y con un tostado parejo; y por favor, poooor favor miren cómo ese queso se funde con la hamburguesa como si fueran un solo producto. Abrazados hasta la muerte.
Pd: advertencia. Pedí esta burger dos veces. Una fue 4 narices. Exquisita. La otra, el pan me tocó menos fresco, y venía menos salseado. 3 narices en esa ocasión.
