Opción vegetariana en Maitencillo

Brooota Maitencillo

¿Conocen la típica feria de Maitencillo? Bueno, al frente hay otra un poco menos conocida. Y ahí está Brooota Maitencillo. Es un restaurante de tapas, jugos naturales y sándwiches, comandado por una pareja española que tenía un café con el mismo nombre en Santiago. Luego de un tiempo, se fueron a vivir a Maitencillo, llevándose consigo la idea de reabrir el local pero en la playa. Y lo lograron.

El local es bien rico. Su terraza, que básicamente es todo el local, da al mar. Además, está muy bien decorado. Se nota que se fijaron en todos los detalles para crear un ambiente acogedor y taquilla, junto con comida semi rápida y sabrosa.

Carta de sándwiches en Brooota Maitencillo

Brooota Maitencillo tiene una carta pequeña, donde ofrecen cuatro sándwiches.

Uno de ellos es vegetariano, que fue el que pedí. Berenjenas y pimentones asados, puré de aceitunas y queso de cabra fundido. También tienen un sándwich de pollo apanado, con lechuga, tomate, queso y alioli. Los otros dos son un Pepito, un clásico de España, y un sánguche de jamón serrano.

Todos cuestan $3.500, por lo que es un lugar muy barato para comer.

Sándwich vegetariano Brooota Maitencillo

Como les comenté, pedí el sándwich vegetariano de Brooota Maitencillo. Por su mezcla de ingredientes, era un sánguche difícil, porque usaron SOLO sabores fuertes. Muy fuertes. Por lo mismo, cuando lo leí en la carta me pareció raro. ¿Cómo lograr que se mezclen de buena manera esos sabores tan intensos?

Pero, dentro de, los de Brooota lo lograron hacer. He probado mucho mejores vegetarianos, pero este responde. Creo que igual cambiaría un par de ingredientes, porque le falta algo que aporte frescor. Y lo sentí muy pastoso. Quizás algo más “crunchy” no sería mala idea.

Aún así, estaba bien. El queso de cabra no era fuerte, y se lograban notar los ingredientes. Admito que el puré de aceitunas pasó un poco piola. Como que me hubiese gustado tenerlo con un poco más de protagonismo.

En resumen: Brooota Maitencillo, buena vista y rápido.

Quizás no les diría que vayan de cabeza. No. Porque seguro hay mejores opciones. Pero comer con esa vista no es algo de todos los días, por lo que al menos pasen a tomarse un jugo natural (los ofrecen con varias mezclas innovadoras).

Y si tienen hambre, no les hará mal pedir un sanguchito. Solo que será “uno más”.