¿Has probado la Francesinha? Dicen que este sanguchito es un santo remedio para la “caña”. Compruébalo conociendo más de su origen portugués y el sabor de su salsita picante.
Así como en todas las familias y en los grupos de amig@s… En la sanguchería no faltan los jugosos 😅 Hoy se te hará agua la boca de sólo pensar en lo bueno que es este sanguchito. Junto a la Torta Ahogada, encabezan el ránking mundial a la hora de hablar de sándwiches jugosos o con caldo.
¿Cómo nace este sándwich tan jugoso y bajonero?
Este sanguchito es de Portugal y podríamos decir que es por lejos el sándwich ícono de la gastronomía portuguesa.
Cuenta la leyenda que este sándwich vio la luz en 1953, en el restaurante Reboleira de Oporto. La autoría se le atribuye al cocinero Daniel David da Silva, que había trabajado varios años en Bélgica y Francia.
Según Da Silva, inventó la Francesinha como alternativa portuguesa al Croque Monsieur. La gracia de esta reinvención está en la salsa picante que se le incorpora, hecha con piri-piri; un pimiento típico de las antiguas colonias portuguesas en África.
Si es portuguesa, ¿por qué se llama Francesinha? Se dice que viene de la admiración de Da Silva por las mujeres francesas, que además de ser guapas, se decía que eran “las más picantes de su época”; es decir, ¡liberales!
¿Cómo es?
Se trata de un atómico sándwich de tres pisos, con rebanadas de pan tostadas rellenas de carne y embutidos; todo esto gratinado con quesito al horno. Y lo más importante de su montaje: la salsa piri-piri o molho para ese toque picantito.
Ojo que en algunos lugares el toque final FINAL es con un huevito frito 🍳😍.
Dato: Puedes hacer la salsa en casa con una mezcla de tomate triturado, cerveza y picante. ¿Te gustaría que nuestro Decano Pipe Sánchez se aplique con una receta de esta emblemática salsa? ¡Tus deseos son órdenes! 😎
Dato extra: si eres fan de las salsas picantes, conoce nuestro top 5 de salsas picantes.
La Francesinha Picarona
En sus inicios la Francesinha resultó ser tan “picarona”, que en sus primeros años en Oporto su consumo estaba restringido sólo para hombres y en bares nocturnos sólo de varones. Y fue en los años 60’ -después de la muerte de su inventor- que comenzó a ganar fama y democratizar su consumo, siendo copiada y cocinada en distintas regiones de Portugal.
Con el tiempo este sanguchito traspasó todas las fronteras y se hizo merecedor de una fama mundial. ¡Un sándwich contundente! Y dicen por ahí que es una excelente cura para la “caña” (resaca). Nuestro Decano se comió una Francesinha in situ y puedes ver aquí su review.
Eso sí con este sanguchito hacemos una excepción a nuestros Mandamientos Sangucheros (algo que nunca hacemos 😱). Y es que si bien creemos -como versa el 12° Mandamiento Sanguchero– que “Los Sánguchez y las burgers se comen con la mano”, éste es para comer con cubiertos; cuchara incluida.
¿Y si nos lanzamos con la versión 365 Sánguchez de una atómica Francesinha? ¡Te leemos! Aprovecha de compartir este post con tu amig@ más jugos@. 😂
*Foto de portada: comeryrascar.com
