La mejor hamburguesa de Boston, POR LEJOS.
SÁNDWICH N°775: Van a tener que hacer fila. Probablemente se sienten en la barra con muy poco espacio. Van a pagar harto. Pero créanme: solo UN mordisco de la deliciosa hamburguesa de #NeptuneOysterBar vale todos los esfuerzos del mundo. Y admito que la idea de pedir una hamburguesa de vacuno en el mejor restaurante de mariscos de #Boston era bastante rara. Pero al primer contacto de esta JOYA con mi lengua se borraron todos mis prejuicios y sabía que estaba ante una de las mejores hamburguesas del mundo. Y quiero compartir este dato con ustedes. Quizás algunos los miren como locos, pero confíen en mi. Sí, es cierto que este restaurante tiene una de las mejores barras de ostras frescas del mundo. Pero guarden espacio para esta maravilla, porque los va a marcar. Es una burger con alioli, queso cheddar, ostras fritas y relish de pepinillos. La carne venía a punto perfecto, sacada de un diccionario. Era jugosa, con un grano grueso y suelto. Fresquita.
El pan mega esponjoso. Aireado. Y con una corteza oscura que aporta un toque amargo justo.
La mayonesa, cremosa, tenía un marcado aporte de ajo. Exquisita. Y se fusiona con el relish, que es un hit. Dulce, ácido, algo pegajoso y crocantito. Gran ingrediente. Y ojo acá, porque NO ME GUSTAN LAS OSTRAS. Y menos me las imaginaba en una hamburguesa. Pero aquí el equipo de #Neptune se las arregló, no sé cómo, para hacer que sumen. Aportan mucha textura y un sabor ligero, algo cítrico. Las amé. Las únicas ostras que he amado en mi vida.
Con cada mordisco sonreía. No podía creer lo que estaba comiendo. Me daban ganas de llamar a un amigo para contarle lo que sentía. Antes del último mordisco, dejé la burger en el plato. La miré. Cerré los ojos. Respiré profundo, como haciéndole honores e intentando atesorar los sabores de esta exquisita hamburguesa, y ataqué. Triste porque se me acabó, pero feliz por haber encontrado la mejor hamburguesa de Boston. Nunca más me lavo los dientes.
