Paper butter & The Burger, Bangkok, Tailandia

Y por qué dije al principio que me taparon la boca? Bueno, estuve viendo el proceso de cocina, y cada paso lo encontraba malo. Como que sabía que me iba a tocar una mala hamburguesa. Solo le pusieron un tomate. UNO!! Lo mismo con EL aro de cebolla. Cuando son tan ricos! Ninguno de los dos ingredientes se iba a sentir en todas las mordidas porque no cubrían toda el área. Hay más. El pan tostado a la plancha lo cubrieron con un bowl, generando vapor… y humedeciéndolo. Nooo, eso no puede ser rico!! Me acordé de @DoctorPichangas y su relación con los completos de Talca. Y para rematar, el pulled pork lo ponían FRÍO. “Una o dos narices”, pensé. Pero apenas lo pruebo, se me abren los ojos al máximo y casi se me paran los pelos. Tengo piel de gallina. Qué brujería tiene esta exquisitez!!

La respuesta: la carne la condimentan en especias tailandesas, emulando el plato Larb-Kua, logrando que quede con toque ahumado, bien picantita y salada. El pulled pork es crocante, se DESHACE al primer contacto con tu lengua, dejando un exquisito sabor. Usan una lechuga que aporta pero que no roba protagonismo, y la salsa de la casa es mortal. ¡Me encantó! Además que el gustito picante me quedó por varios minutos.