Mi peruano favorito

El Mítico Sanguchería

Cómo llegué a El Mítico Sanguchería

Mi relación con El Mítico Sanguchería es una de años. Y es que hace un tiempo, tenían un delivery en Vitacura. En esos tiempos, le contaba a todos, orgulloso, que era POR LEJOS el mejor delivery de sándwiches de Chile. Sin comparación.

Pero hubo un problema de permisos, y cerraron de un día para otro, dejándome “viudo de domicilio”. Porque todos sabemos que esta categoría la dominan las pizzas y el sushi, pero en sándwiches es muy difícil encontrar uno bueno.

Así fue que sufrí la desaparición de El Mítico Sanguchería. Hasta hoy. Porque volvió en gloria y majestad. Esta vez, con un restaurante completo para ellos, en plena Avenida Nueva Providencia. Gracias, señor.

Fotos con mi celular Sony Xperia X

Restaurante El Mítico Sanguchería

El Mítico Sanguchería es un restaurante de sándwiches chilenos y peruanos, ubicado en el corazón de Providencia.

Hizo su fama con un ex delivery en Vitacura, y ahora goza del lleno completo de su local todos los días.

Afuera, en la vereda de Nueva Providencia, El Mítico Sanguchería tiene unas ocho mesitas con sus respectivos quitasoles. De todas maneras, el mejor lugar para zamparte un sanguchito sanguchote. Adentro es un poco más apretado todo, salvo que subas al segundo piso.

Les dejo su página web y su Facebook.

Carta de sándwiches de El Mítico Sanguchería

El Mítico Sanguchería ofrece dos secciones de sándwiches.

La primera son sándwiches chilenos. Aquí, todos de carne mechada, puedes elegir cinco opciones distintas de acompañamientos. Ojo, que si no comes carnes rojas, puedes reemplazar la mechada por pollo o pescado. La preferida de todos los del restaurante, es la “Con Cabra” ($6.900), que tiene queso de cabra, palta, cebolla caramelizada, papas hilo y mayonesa mítica al cilantro.

La segunda sección, mi preferida, son sándwiches peruanos. Hay siete opciones, donde todas son bastante jugadas y distintas a lo que estamos acostumbrados a ver. Por ejemplo, está el “Plex” ($6.400), con pollo y camarones Ponzu. También hay uno de “Pollo Limeño”, y el que elegí yo, de pescado frito.

¿Algo para robarte el corazón? Todos los sánguches, además de ser enormes, vienen con papas fritas (con cáscara y pimienta) y salsas míticas.

Sándwich de pescado frito en El Mítico Sanguchería

Uf. Tengo que partir diciendo que los sándwiches de El Mítico Sanguchería son gigantescos, así que vengan con hambre. Y ojo que no son caros para su sabor y tamaño! Así que partieron con dos puntos a favor.

¿Algo increíble? Muchas cosas, pero su pan italiano casero se lleva muchísimos aplausos. Es como una mezcla de un Ciabatta con un pan de campo. Me encantó, y quiero el dato, porque este es el pan que quiero usar para cuando haga sándwiches grandes en mi casa.

El pescado es una merluza frita bien sabrosa y suave. El apanado es liviano, por lo que se hace fácil comer.

En general, es un sándwich súper fresco por sus componentes. Pero a esto, súmenle que AMO las salsas de aquí, y que además las papas hilo están perfectamente crocantes para tener un sánguche digno de cinco cuatro narices de chancho. ¿Qué le faltó para las cinco entonces!!? Llámenme exagerado, pero la leche de tigre que viene en un pote aparte, era casi puro jugo de limón. Y sin haberlo probado, se lo eché entero al sándwich. Gran error.

Y lo otro, es que dado que tiene bastante pan, me hubiese encantado un poco más de mayonesa mítica. Pero son pequeños detalles. Pequeñísimos, incluso. Porque el sándwich estaba mortal.

Un sánguche tan fresquito, TIENE que venir con un schop Austral Lager. Mejores amigos.

En resumen: El Mítico Sanguchería es mi peruano favorito

El mundo sanguchero celebra la resurección de El Mítico Sanguchería. Y es que les juro que los echaba mucho de menos. TODOS sus sánguches son buenos, y ahora parezco cabro chico en vísperas de Navidad, esperando poder probarlos todos.

La sanguchería El Mítico, se los digo desde ya, es uno de los restaurantes que HAY que conocer si es que te gustan los sánguches. Se nota que aquí hay maestría en la cocina, porque el sabor es, justamente, mítico. Vengan.